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Contar historias en el aula es una de las formas más antiguas de enseñar a los niños una serie de habilidades. Se ha utilizado en la educación durante años con el objetivo principal de desarrollar a los alumnos en muchas áreas. Los cuentos permiten a los niños evadirse de las preocupaciones o problemas que puedan tener y les aportan asombro sobre la vida, ¡además de magia!
Analizamos los beneficios de la narración de cuentos para que puedas comprender la importancia de los mismos en el aula.
Uno de los beneficios más obvios de la narración de cuentos en el aula es que ayuda a desarrollar los conocimientos de los idiomas de los niños. La lectura, especialmente en voz alta, puede ayudarles a formar palabras nuevas y complejas que no han escuchado antes. Los niños pueden empezar a construir frases con oraciones complejas y ampliar su vocabulario a medida que las diferentes palabras se ponen en contexto para ellos.
Contar historias permite a los niños adentrarse en escenarios que ocurren en la vida real y que quizá no conozcan todavía. Esto les ayuda a crecer como personas, ya que pueden tener una mentalidad más abierta sobre la vida. Además, la narración de cuentos puede preparar a los alumnos para posibles escenarios que podrían ocurrir en su futuro.
Los niños también exploran la vida de otras personas a través de los cuentos. Pueden adquirir una actitud positiva para comprender y respetar las diferencias de las personas, como las culturas, las etnias, las discapacidades, las creencias, etc.
Otro aprendizaje clave es el conocimiento de las tradiciones. Los cuentos pueden enseñar a los niños las tradiciones que tienen diferentes personas en la vida real. Pueden descubrir qué tradiciones tienen las culturas y las religiones y cómo las celebran para comprender mejor el mundo y las personas que lo componen. Esto permite a los niños conocer personas y lugares desconocidos.
Contar cuentos ayuda a los niños a socializar con los demás en su clase. Un cuento puede aumentar su confianza para interactuar con otros alumnos con los que quizá nunca hayan hablado antes; esto se debe a que muchos cuentos tienen el poder de iniciar conversaciones sobre el libro. Los niños se entusiasman con ciertas historias y se mueren por hablar de lo que piensan del libro o por comentar sus partes favoritas con todo el mundo. También pueden establecer vínculos con otras personas a través de intereses comunes. Esto hace que se formen amistades que tal vez no se hayan dado antes.
Al socializar más, los niños adquieren habilidades de trabajo en equipo. Los cuentos pueden mejorar la capacidad de trabajo en equipo, especialmente cuando la clase se turna para leer partes del cuento. Al hacerlo, la narración de cuentos fomenta la participación para leer en voz alta al resto de la clase.
Uno de los mejores beneficios que ofrece la narración de cuentos en el aula para los niños es el enorme impacto en el bienestar mental. Los cuentos pueden mejorar su bienestar, ya que es un momento en el que pueden relajarse tras el aprendizaje. Les da tiempo para respirar y evadirse de la realidad.
También es un momento para reflexionar sobre los temas de la historia con los que pueden relacionarse. Los cuentos pueden hacer que los niños se sientan menos solos al explorar una gran variedad de temas que ocurren en la vida real. Si algo ocurre en la vida de los niños, pueden reconocer las mismas luchas y sentirse más felices con sus situaciones.
Otra forma en que los cuentos pueden ayudar al bienestar de los niños es dándoles la confianza necesaria para hablar abiertamente con otros sobre sus sentimientos. Esto puede deberse a un personaje o a un tema de la historia con el que se sientan identificados. Puedes debatir con tu clase sobre los sentimientos que les ha provocado la historia, para que puedan explorar cómo se sienten en el momento y fuera de la escuela. Esto puede ayudar a aliviar la tristeza o el estrés, ya que pueden desahogarse de cualquier problema.
Los cuentos suelen contarse en voz alta. Esto significa que los niños escuchan atentamente, lo que ayuda a mejorar las habilidades auditivas vitales. Para asegurarse de que su clase sigue escuchando (sin aburrirse), reproduzca lo que ocurre en la historia, desde cambiar las voces de los distintos personajes hasta representar las escenas para que las disfruten.
Los cuentos son muy inspiradores, especialmente para los niños. Pueden despertar su imaginación, que se convierte en creatividad. Un cuento puede suscitar nuevas ideas para que los niños las consideren, ya sea con su propia escritura o de otra forma creativa. Es estupendo permitir que los niños se expresen de cualquier forma creativa. La creatividad no sólo es divertida, sino que es vital para que los niños se desarrollen a lo largo de su vida, sobre todo para los más pequeños, ya que es una forma perfecta de desarrollar la motricidad fina.
Para los niños, contar cuentos no es sólo leer y escuchar, sino que les permite evadirse de su vida cotidiana y sumergirse en su imaginación. Además, desarrolla habilidades clave en muchas áreas que necesitarán y deben seguir desarrollando.
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